Casablanca
Fernando Rivillas
Fernando Rivillas tiene dos pasiones. Ambas requieren precisión: el bisturí y el pincel. Ninguna tolera errores. La cirugía y la acuarela exigen de pensamientos y quehaceres seguros y rápidos.
Rivillas es médico egresado de la Universidad de Antioquia, pero entusiasta y precoz amateur del arte y de la pintura. Ganó su primer concurso de acuarela cuando cursaba el bachillerato en el Liceo de su propia universidad. Dos maestros orientaron su gusto y sus conocimientos. Marco Tulio Castaño, ‘MATUCA’ y Jorge Cárdenas. Su técnica la adquirió en la Academia de Antonio Echavarría. La acuarela reclama pensar la pincelada. Asimismo, la cirugía que ha practicado por cerca de veinte años en hospitales de Urabá.
«Tócala otra vez, Sam», es una famosa frase asociada a la película Casablanca (1942), dirigida por Michael Curtiz, interpretada por Ingrid Bergman y Humphey Bogart y ganadora del premio Oscar como mejor película, pero que, en realidad, nunca es pronunciada a lo largo de la película, ni en la versión original ni en la doblada al castellano. Lo que en realidad el personaje de Ingrid (Ilsa) dice al pianista es «Tócala una vez» («Play it once») y «Tócala, Sam» («Play it, Sam»), refiriéndose a una canción que solía interpretar en París, donde ella conoció al protagonista y al propio Sam.
La frase se hizo famosa gracias a la película de 1972 Suenos de un seductor (cuyo título original es precisamente Play It Again, Sam), basada en la obra de teatro homónima de Woody Allen y llevada a la pantalla por el director Hebert Ross.